Tai Hu (Lago de la Paz)

Pues ya llegamos al parque temático del Taihu. Con la entrada te dan un mapa que hace que el parque parezca enorme, pero nos dimos cuenta que las distancias en el mapa eran casi ridículas.

No teníamos ni idea de como visitarlo porque no había ninguna indicación. Había autobuses que tenían pinta de dar vueltas por el parque o de realizar una visita guiada. Al final servía para llegar al verdadero inicio del parque.

En seguida pudimos ver el lago y coger un ferry a la estrella del parque, la isla de SanShan. La verdad es que casi todas las edificaciones del lugar no deben tener más de diez años y parece un lugar totalmente inventado, como si pusieran elementos que llaman la atención todos juntos y los mezclaran para crear vistas bonitas.



Hay varios templos en la isla, uno de ellos taoísta lleno de monjes fumando cigarrillos, cosa que choca por la imagen de santos que tenía de estas personas. Nosotros compramos música taoísta en este templo y rezamos para que toda la música de esta religión no sea parecida, estaba increiblemente mal grabado y ni el más sagaz encontraría indicios de armonia en las pistas de ese cd.
Mirando hacia el lago vimos unos hombres que conducían manadas de patos a golpe de remo, los llevaban de un lado a otro sin ton ni son aparentemente. Nos gustó muco un puente que estaba cerca del muelle del ferry.
Un templo, también Taoísta, albergaba una estatua de varios pisos de altitud del maestro (Lao shi), muy nueva pero bastante impresionante.



El culmen de los paisajes inventados se puede ver en la parte posterior de la isla, donde con grandes cantidades de yeso y hormigón, se crean senderos enteros imitando piedra, estatuas, cuevas, miradores etc. Lo poco auténtico del lugar puede no llegar a gustar, aunque bueno, las vistas de todos los elementos juntos eran bonitas. Aquí os dejo un vídeo, no hagáis demasiado caso de los comentarios.

Tuvimos que correr, como siempre, para no quedarnos en la isla y poder coger un ferry. Volvimos a la península de la cabeza de tortuga. Muy difícil ver la cabeza la verdad, de hecho, yo no la vi. Íbamos un poco apretados de tiempo y ya un poco cansados del estilo del parque. Decidimos darlo todo y recorrer un poco más por la orilla donde encontramos nuevos rincones con cierto encanto, como el faro y un nuevo templo budista.


Ya tarde cogimos un nuevo autobús de línea, visitamos a nuestro amigo McDonalds cerca de la estación de tren y autobús. Cogimos el último autobús a Hangzhou. La verdad es que el fin de semana estuvo fenomenal, sólo tres personas, muy fácil para viajar, sobre todo si te llevas tan bien como con Alejandra.
En Hangzhou, Ismael había vuelto de HuangShan, la montaña amarilla, y Bosco otro esperado nuevo integrante del equipo, había perdido su conexión en París y vendría al día siguiente.