Lago ErHai en Dali, Yunnan.

Os relatamos aquí un día de excursión alrededor del lago ErHai . Comenzamos muy de mañana, a las 8.30, después de un fallido desayuno en el hostal en el que estábamos. “Tom” era la agencia que nos guiaba. En principio apareció sólo un taxista , es la forma típica de ir, una persona que no habla inglés (ni castellano, claro) te acompaña en un tour haciendo las paradas que se quieran, pero el conocimiento corre de tu cuenta…pero esta vez sonó la flauta y apareció su hermano Lizhen , que había estudiado en la universidad y hablaba inglés. Ambos eran de la lejana provincia de Tianjin (al este de Pekín) y habían emigrado a Yunnan para trabajar…Nos trataron fenomenal, y la excursión fue un completo éxito .

El Lago de la Oreja

Es el séptimo lago de agua dulce de China en tamaño y está rodeado, además de Dali , de pueblecitos de la minoría Bai , que se dejan notar por su antigua forma de hacer edificios y por los famosos mercadillos . En realidad, el famoso era el de Dali, pero los pueblos se han apuntado a la fiesta y ya tienen todos su mercadito. Uno de los pueblos más famosos es XiZhou , a unos cuantos kilómetros al norte de Dali. Allí pudimos observar una mañana de mercado y los trajes típicos de los bai. LiZhen nos llevó a una zona más apartada para enseñarnos la arquitectura típica del lugar. Charlamos sobre muchísimas cosas, ya sabemos que yo soy un pesado, y entre otras cosas nos contó algunas claves de la vida en el campo y sus tremendos problemas , sobre qué se cultiva por allí: frutas, arroz y sobre todo Judías, de las que sale el Tofu. Cuando vienes por estos lares, comprendes de donde sacan tanta cantidad de este ingrediente.

Otra de las paradas técnicas en el viaje fue lo que en lenguaje común es “un gol por la escuadra”. El bueno de LiZhen nos paró en una tienda de artesanos Bai , en la cual pudimos admirar la fabricación de mantos tintados que parecen ser muy preciados en la zona y en toda China. Desde luego su producción llevaba un trabajo arduo y el precio era de risa, pero no teníamos ya donde meter más equipaje.

Shuanglang

Después de recorrer una gran distancia alrededor del lago atravesando campos y campos de cultivo, llegamos a Shuanglang , otro pequeño pueblo que sinceramente destacaba por su olor a mierda. Tenían una extraña profusión por la acumulación de estiércol. Las vistas del lago y la montaña ZhongGe eran impresionantes, a la salida del pueblo volvimos a parar y nos encontramos con una boda bai , la gente iba vestida normal y nos invitaron a comer algo en un torbellino imparable . Paseaban con alegría la cabeza cercenada de un pobre cerdito y cantaban y gritaban con alegría. Un bodorrio un poco diferente a los de aquí. También visitamos la plaza del ayuntamiento, lugar de reunión de los mayores.

Wase, pueblo pesquero

Ésta fue la siguiente parada. En este pueblo, uno de los más visitados, vuelve a haber un mercado muy concurrido . Lizhen y su hermano consiguieron que no nos timaran en el restaurante, ya que vimos el percal y decidimos invitarles antes. Tomamos de todo, tofu picante, pescado seco picante, arroz, vegetales, setas, pimientos etc. Susodicho restaurante estaba literalmente en el mercadillo, así que no tuvimos oportunidad de perdérnoslo. A la salida del pueblo nos encontramos con la pequeña isla PutuoDao , de pequeñas dimensiones y gran lugar para hacerse foto ya que dentro alberga el pequeño XiaoPutuo Si , un “cuco” templo.

Haidong y Parque ErHai

Ya a las cuatro de la tarde nos fuimos a visitar otro templo y una pequeña cuevecita en un recodo del lago, además atravesamos el pueblo de Haidong , donde vimos gente que asfaltaba a “mano” una carretera con una especie de carbón…no era una visión que llevara a la alegría. Como última parada nos reservamos el parque de ErHai , en el sur del lago, varios pabellones adornaban una plataforma de asfalto desde la que se podía tomar un relajante baño.

…y de postre:

Volvimos a pasear por las calles de Dali parando en Jim´s Café y Café del Tíbet, ambos lugares organizan viajes al Tibet desde Shangrila (Zhondian o Shangelila) atravesando parte del Himalaya en unos 7 días. Se necesitan permisos distintos que los que te llevan a Lhasa y en invierno y marzo, las carreteras están cortadas por el hielo. Eso era algo que nosotros sabríamos al día siguiente. Esa tarde intentamos por todos los medios conseguirlo, pero era caro para dos y con pocas probabilidades de poder pasar por esa vía.

Al final, con una cervecita y unos síntomas que curiosamente se parecían al mal de altura pasamos una noche realmente mala…creemos que el hecho de beber algo de alcohol nos deshidrató un poco y eso hizo que pudiéramos notar mareos, nauseas y fueramos incapaces de dormir.